Nuevas investigaciones comprueban efecto terapéutico: Médicos utilizan el yoga para tratar problemas de salud Practicar este tipo de posturas corporales y técnicas de respiración ayuda a soportar mejor la quimioterapia, mejora el sueño y alivia el dolor muscular y el estrés. Amalia Torres Un nuevo estudio comprobó lo que siempre se ha pensado: tratar la mente y el cuerpo como un todo mejora la calidad de vida de los enfermos de cáncer. Una investigación realizada por el Anderson Cancer Center de Houston, en conjunto con el mayor centro de yoga de la India, comprobó que las mujeres con cáncer de mama que practican yoga se sienten mejor que aquellas que no lo hacen. El centro, que investiga los efectos del yoga tibetano en mujeres con cáncer de mama que reciben quimioterapia, obtuvo un aporte de 2,4 millones de dólares del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, el mayor que se haya entregado para este tipo de estudios. Mejora las defensas La investigación, que analizó a 61 mujeres que estaban recibiendo quimioterapia, separó a 30 de ellas para que practicaran yoga dos veces a la semana. Un mes y medio después, quienes siguieron el taller tenían mejor funcionamiento físico, se sentían menos fatigadas y afirmaban que su salud general estaba mejor. Así lo dio a conocer el médico a cargo del estudio, Lorenzo Cohen, en la XLII reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología. El mismo equipo de especialistas realizó en 2004 otra investigación que concluyó que el yoga mejora la calidad del sueño en pacientes con cáncer, sin necesidad de medicamentos. Verónica Roberts, sicóloga del centro de oncología de la Clínica Las Condes, es testigo de los buenos resultados que tiene el yoga en pacientes oncológicos, ya que desde marzo la clínica ofrece talleres de este tipo a sus enfermos. "Esta disciplina les permite bajar los niveles de estrés, lo que aumenta las defensas inmunológicas en el cuerpo. Esto, a su vez, les ayuda a los pacientes a enfrentar mejor el tratamiento y a elevar su calidad de vida. Además, como son talleres grupales, estimula la socialización". En la Agrupación Vivo Positivo también ofrecen cursos gratuitos de yoga para pacientes con VIH, lo que, según el profesor Marcos Muñoz, ha ayudado a bajar la ansiedad y la agresividad de las personas con sida. Otra investigación, publicada en Annals of Internal Medicine, concluyó que el yoga también es efectivo para quienes sufren dolores crónicos en la espalda baja. Francisco Soza, traumatólogo de la Clínica Tabancura, está de acuerdo con estos resultados. Para él, son indudables los beneficios del yoga como una técnica complementaria, y por eso les recomienda a sus pacientes practicarlo. Claro que debido a las lesiones, los deriva a centros donde un kinesiólogo guía las clases. En esos casos se le llama yogaterapia. "Se trata de una gimnasia médica guiada por un personal trainer que enseña las posturas adecuadas para cada persona según su dolencia, y explica cómo realizarlas sin lesionarse. Se trata de una terapia de mantención en personas que tienen alguna lesión establecida, que les ayuda a crear el hábito del deporte, lo que es muy efectivo en la recuperación", explica Soza. "Sirve mucho cuando hay disfunción muscular y esquelética. Con yogaterapia se puede rehabilitar de artrosis, hernias, dolores a la columna, problemas en la rodilla y los hombros", añade la kinesióloga Paola Valenzuela, quien desde hace tres años se dedica a este tipo de terapia en el centro especializado Yogalab. Antes de comenzar la terapia, la profesional revisa los exámenes médicos de los pacientes para conocer más en profundidad su lesión. Las posturas, que van desde elongaciones estando de pie -sirven para mejorar el equilibrio y fortalecer los cuádriceps- hasta invertidas, se hacen según la capacidad de cada persona. "Estas posiciones disminuyen los dolores, aumentan la flexibilidad, estabilizan la espalda y crean conciencia de los movimientos corporales", dice Paola Valenzuela. Aprender a respirar Emiliana Naretto, médico broncopulmonar de la Universidad de Chile, ha investigado cómo influye el yoga, y especialmente sus técnicas de respiración, en pacientes con daño crónico del aparato respiratorio. "Mejora el uso de los músculos que se usan para respirar, como el diafragma", explica. Para personas con crisis de angustia, con altos índices de estrés, depresión o trastornos del sueño, los ejercicios de respiración del yoga también pueden ser muy útiles, según explica la sicóloga clínica Andrea Holmes. "La respiración yóguica, que implica respirar de manera abdominal, con inhalación y exhalación profunda, permite que la persona se sienta más vital y ayuda a controlar los estados emocionales. La respiración corta, en cambio, que es la que normalmente todos usamos, se relaciona con un estado emocional de angustia y enojo. Por eso hay que cambiarla", sentencia. FUENTE: http://www.puntomujer.emol.com/sin_complejos/noticia/detallenoticia.asp?id=%7B6CD7E441-18AA-43CA-B660-B39AEE0CA052%7D
Nuevas investigaciones comprueban efecto terapéutico: Médicos utilizan el yoga para tratar problemas de salud Practicar este tipo de posturas corporales y técnicas de respiración ayuda a soportar mejor la quimioterapia, mejora el sueño y alivia el dolor muscular y el estrés. Amalia Torres Un nuevo estudio comprobó lo que siempre se ha pensado: tratar la mente y el cuerpo como un todo mejora la calidad de vida de los enfermos de cáncer. Una investigación realizada por el Anderson Cancer Center de Houston, en conjunto con el mayor centro de yoga de la India, comprobó que las mujeres con cáncer de mama que practican yoga se sienten mejor que aquellas que no lo hacen. El centro, que investiga los efectos del yoga tibetano en mujeres con cáncer de mama que reciben quimioterapia, obtuvo un aporte de 2,4 millones de dólares del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, el mayor que se haya entregado para este tipo de estudios. Mejora las defensas La investigación, que analizó a 61 mujeres que estaban recibiendo quimioterapia, separó a 30 de ellas para que practicaran yoga dos veces a la semana. Un mes y medio después, quienes siguieron el taller tenían mejor funcionamiento físico, se sentían menos fatigadas y afirmaban que su salud general estaba mejor. Así lo dio a conocer el médico a cargo del estudio, Lorenzo Cohen, en la XLII reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología. El mismo equipo de especialistas realizó en 2004 otra investigación que concluyó que el yoga mejora la calidad del sueño en pacientes con cáncer, sin necesidad de medicamentos. Verónica Roberts, sicóloga del centro de oncología de la Clínica Las Condes, es testigo de los buenos resultados que tiene el yoga en pacientes oncológicos, ya que desde marzo la clínica ofrece talleres de este tipo a sus enfermos. "Esta disciplina les permite bajar los niveles de estrés, lo que aumenta las defensas inmunológicas en el cuerpo. Esto, a su vez, les ayuda a los pacientes a enfrentar mejor el tratamiento y a elevar su calidad de vida. Además, como son talleres grupales, estimula la socialización". En la Agrupación Vivo Positivo también ofrecen cursos gratuitos de yoga para pacientes con VIH, lo que, según el profesor Marcos Muñoz, ha ayudado a bajar la ansiedad y la agresividad de las personas con sida. Otra investigación, publicada en Annals of Internal Medicine, concluyó que el yoga también es efectivo para quienes sufren dolores crónicos en la espalda baja. Francisco Soza, traumatólogo de la Clínica Tabancura, está de acuerdo con estos resultados. Para él, son indudables los beneficios del yoga como una técnica complementaria, y por eso les recomienda a sus pacientes practicarlo. Claro que debido a las lesiones, los deriva a centros donde un kinesiólogo guía las clases. En esos casos se le llama yogaterapia. "Se trata de una gimnasia médica guiada por un personal trainer que enseña las posturas adecuadas para cada persona según su dolencia, y explica cómo realizarlas sin lesionarse. Se trata de una terapia de mantención en personas que tienen alguna lesión establecida, que les ayuda a crear el hábito del deporte, lo que es muy efectivo en la recuperación", explica Soza. "Sirve mucho cuando hay disfunción muscular y esquelética. Con yogaterapia se puede rehabilitar de artrosis, hernias, dolores a la columna, problemas en la rodilla y los hombros", añade la kinesióloga Paola Valenzuela, quien desde hace tres años se dedica a este tipo de terapia en el centro especializado Yogalab. Antes de comenzar la terapia, la profesional revisa los exámenes médicos de los pacientes para conocer más en profundidad su lesión. Las posturas, que van desde elongaciones estando de pie -sirven para mejorar el equilibrio y fortalecer los cuádriceps- hasta invertidas, se hacen según la capacidad de cada persona. "Estas posiciones disminuyen los dolores, aumentan la flexibilidad, estabilizan la espalda y crean conciencia de los movimientos corporales", dice Paola Valenzuela. Aprender a respirar Emiliana Naretto, médico broncopulmonar de la Universidad de Chile, ha investigado cómo influye el yoga, y especialmente sus técnicas de respiración, en pacientes con daño crónico del aparato respiratorio. "Mejora el uso de los músculos que se usan para respirar, como el diafragma", explica. Para personas con crisis de angustia, con altos índices de estrés, depresión o trastornos del sueño, los ejercicios de respiración del yoga también pueden ser muy útiles, según explica la sicóloga clínica Andrea Holmes. "La respiración yóguica, que implica respirar de manera abdominal, con inhalación y exhalación profunda, permite que la persona se sienta más vital y ayuda a controlar los estados emocionales. La respiración corta, en cambio, que es la que normalmente todos usamos, se relaciona con un estado emocional de angustia y enojo. Por eso hay que cambiarla", sentencia. FUENTE: http://www.puntomujer.emol.com/sin_complejos/noticia/detallenoticia.asp?id=%7B6CD7E441-18AA-43CA-B660-B39AEE0CA052%7D
Comentarios